21 enero 2007

Ratas

De la alcantarilla de la esquina salió una rata. Tenía el tamaño de un gato tragón, que nunca sale de casa. Pero esta rata sí que salía. Paseaba su panza de una banqueta a otra. Nadie se atrevía a acercarse. Hasta que la rata se cansó. O encontró algo bueno para comer. O quizá ya no pudo mover más su panza. O quizá reventó. O llegó una rata más grande y se la comió. O encontró otra rata y se fueron a hacer ratitas.

No hay comentarios.: